Storytelling para vender: ¿cómo escribir historias que venden?
En este artículo, vas a encontrar los principios del storytelling para vender. Son los más efectivos y fáciles de implementar, porque entiendo que tu aspiración no es el Nobel, sino escribir bien y encontrar un espacio de expresión para comunicar con tu propia voz.
Encontrar tu propio estilo al escribir, reclama intencionalidad comunicativa, comprender ciertos principios narrativos y algo de práctica.
En esta guía, te ofrezco cuatro principios y tres estrategias para ayudarte a mejorar tu comunicación con textos claros, coherentes y atractivos para tus lectores.
¿Por qué es importante el storytelling para vender?
Escribir buenas historias para vender mejor es una aspiración sensata de los creadores de contenido que ofrecen sus productos o servicios online.
Una buena historia puede ser leída y releída, preservada y compartida a lo largo de los años y a través de las generaciones, dándole un alcance y una influencia que desdibuja barreras temporales y geográficas.
Con la expansión de las tecnologías digitales, una publicación en tu blog o en redes sociales pueden llegar a audiencias globales en cuestión de segundos, amplificando tus palabras de una forma sin precedentes.
En el mundo profesional, la escritura como habilidad proyecta competencia y confianza. Reflexionar sobre la forma de utilizar el storytelling para vender en tu área, promueve el pensamiento tanto crítico como creativo, ayudándonos a descubrir conexiones entre conceptos que ignorábamos hasta el momento.
Aunque tengo conciencia de que mi perspectiva es parcial -en definitiva el storytelling y la escritura son mi profesión- si tuviera que elegir una habilidad para obtener de ella el máximo rédito en el mundo digital, sin duda sería la escritura y específicamente, la habilidad de contar historias para vender productos y servicios online.
¿Cómo utilizar el storytelling para vender?
Comencemos por los fundamentos: tanto la adecuación gramatical como la corrección ortográfica son esenciales en la construcción de un texto. Sin embargo la escritura implica cohesión, coherencia y la capacidad de sostener el interés del lector con una trama interesante.
Para ello, sin duda nuestra primera intención debería ser asegurarnos que el receptor entienda el mensaje que queremos compartir sin esfuerzo adicional
Escribir bien -para vender mejor- implica estructurar las ideas en un orden fácil de seguir, con oraciones concisas, preferentemente cortas, evitando términos técnicos que dificulten la comprensión.
La coherencia es un objetivo ineludible. Un texto coherente se enfoca en un tema principal sin digresiones innecesarias y presenta transiciones que unen las ideas naturalmente.
Estos son los cimientos para mejorar la escritura, pero -en esto radica la mayor frustración de quien comienza a escribir para compartir su conocimiento o experiencia online- un texto que no logra captar la atención del lector fracasa en su propósito. Sin importar cuán claro y coherente sea.
La atención es esquiva y adora la variedad. En este sentido, te sugiero seguir leyendo para aprender los principios para mejorar y enriquecer tu redacción.
Principios del storytelling para vender.
Definir la acción.
No hay sorpresas: también cuando crear un storytelling para vender supone dominar el tema del cual se escribe. El «qué» tiene que ser consistente y eso se logra con conocimiento, experiencia y/o con investigación.
En todo texto la acción, «lo que pasa» o «de lo que hablo» es el punto de partida para comenzar a contar. El contenido de tu relato es tan importante como su forma.
Con esto no quiero decir que tengas que encerrarte en una cueva durante siete años para que florezca tu sabiduría interior. No es necesario que medites sobre el sentido de la existencia comiendo raíces y lamiendo las piedras para no morir de sed. Sí es necesario que elijas estratégicamente tus temas y que antes de escribir corrobores cuáles son los puntos claros en tu mente al respecto para desarrollarlos.
Delinear el protagonista.
Si tenemos acciones para contar… tenemos personajes que las protagonizan. Es natural protagonizar las historias de tu storytelling para vender. No tiene nada de vanidoso contar tu experiencia si puede inspirar o guiar a alguien más. Ni tendría que causarte pudor expresar tu perspectiva sobre temas en los cuales tengas competencia.
Igualmente importante es que incluyas a tu cliente ideal como personaje y no olvides, que también merece un rol protagónico. Con ese fin, que se vea reflejado en tus relatos, que sienta que comprende y vive el camino que estás narrando. Porque una historia donde tu cliente se reconoce, es una historia que conecta y vende.
¿Reconociste al personaje principal de tus historias? ¡Enhorabuena! Ya habrá tiempo de encontrar la forma de darle voz a esos otros personajes que también son importantes en tu historia.
Delimitar tiempo y el espacio.
¿A qué me refiero con «tiempo y espacio»? Cada tipo de texto reclama una temporalidad específica. Suena complicado, pero es simple y podemos seguir una regla que no falla: el tiempo de la narración online es el presente histórico. Esa forma del relato en la cual se utiliza el presente del indicativo.
Pero aún más importante que el detalle técnico es que pienses en el contexto de tu relato. ¿Por qué? Porque en el mundo online no es una certeza que compartas el contexto cultural con quienes te leen.
Sin sustos. Hay formas relativamente fáciles de controlar el contexto sin neutralizar tu estilo personal. Por ahora, lo que te sugiero es permanecer muy atenta a los acuerdos culturales.
Escribir bien de acuerdo al contexto, implica que vigiles tus palabras sin dar por sentado que quien lee es una persona que conoce tu tierra y su lengua y con la cual podrías dar mucha información por supuesta. Cuando escribimos para el mundo, nada es supuesto.
Especificar tu focalización.
La focalización de un relato es el lugar desde el cual estás mirando la historia. Somos profesionales, hijos, padres, amigos, de pronto esposa o ex-esposa y como éstos, tantos otros roles en tu vida.
Cada uno de ellos supone una forma de mirar el mundo y sus circunstancias. La focalización no es únicamente una cuestión técnica; es una decisión estratégica que define qué detalles resaltar, qué emociones expresar y a quién conmover con tus palabras.
La coherencia narrativa no depende de una única perspectiva fija, sino de una intención clara. Es lícito alternar focalizaciones siempre que el lector comprenda por qué ocurre el cambio. Es más, en el storytelling para vender, ofrecer diferentes perspectivas puede generar empatía con distintos segmentos de tu audiencia.
¿Cuál es tu mirada al momento de narrar? Si bien es cierto que no existen fronteras entre tus formas de ver -ser y estar en el mundo- cuando comiences de escritura es enriquecedor que comprendas y anticipes tu focalización al escribir.
Siempre revisar y corregir.
Revisar textos es elemental. Lo afirmo sabiendo que me pesa revisar lo que no me pesa escribir. En ocasiones publico artículos y al releerlos descubro errores de sintaxis y tipeo. Algunas veces me descubro errores básicos de adecuación porque pensaba escribir una cosa, escribí otra y en el trayecto cometí un error.
Como mencioné antes, la claridad es una necesidad no un ornamento. ¿Cuáles son los principales errores que buscamos al revisar nuestros textos?
- Errores ortográficos.
- Errores de sintaxis.
- Problemas de coherencia.
La gramática correcta es uno de los pilares de la claridad. Muchas veces, cometemos errores de distracción que complican la recepción del mensaje. Estos errores suelen ser simples pero importantes. Conocer estos errores es vital para mejorar. A continuación, te cuento los tres más comunes:
- Confundir «por qué» con «porque».
- Usar mal los tiempos verbales.
- Problemas con la concordancia de sujeto y verbo.
Usar herramientas como Grammarly o consultar la Real Academia Española (digital o en el viejo y querido diccionario físico) es de mucha ayuda para aprender y evitar errores en el futuro.
Storyelling para vender: estilo y técnica.
El estilo define al narrador y cómo los lectores perciben el mensaje. Le llamamos “estilo” a la forma en la cual expresamos ideas con una voz y tono personal. Cada autor tiene un estilo único que varía en función del género, la intención y el público. Definir y pulir tu estilo de escritura reclama acciones concretas:
- Leer para inspirarte y aprender nuevas palabras.
- Escribir con regularidad para mejorar tu habilidad.
- Hacer autoevaluación de tus textos regularmente.
- Aprender de otros y recibir feedback.
- Compartir tus textos para intercambiar ideas.
Con el objetivo de darle forma a tu storytelling para vender tres estrategias son sustanciales: la organización del texto, el uso de un vocabulario variado y los recursos de estilo. Estos elementos hacen tus textos más atractivos y no suelen ser mencionados en los artículos sobre storytelling online. Veamos con más detalle cada uno de ellos:
Organización y estructura del texto.
Una estructura bien planificada hace que las ideas fluyan de manera lógica, con este fin, recurrimos a tres aspectos:
- Utilizar encabezados claros para guiar al lector.
- Dividir el contenido en párrafos cortos y concisos.
- Considerar el uso de listas para resaltar puntos importantes.
Con las anteriores nociones en mente, crea un esquema o una guía que te ayude a mantener el enfoque y la coherencia durante el proceso. Narrativamente, este esquema incluye:
- Introducción: presentación del tema y objetivos del texto.
- Desarrollo: exposición de ideas y argumentos principales, divididos en secciones o párrafos.
- Conclusión: resumen y cierre del texto.
Mientras la introducción captura la atención del lector y presenta el tema, el desarrollo aborda las ideas principales con claridad y lógica y la conclusión refuerza los puntos clave y ofrece un cierre a lo que hayamos presentado.
Aunque la estructura tripartita es universal, cada escritor gestiona estos elementos de manera única.
Algunos optan por introducciones directas, mientras que otros prefieren iniciar con una anécdota o una pregunta provocadora. El desarrollo puede presentar argumentos con una secuencia lineal o mediante comparaciones y ejemplos que refuercen el mensaje. Y la conclusión, lejos de ser un simple resumen, puede dejar una sensación de cierre o abrir la puerta a nuevas ideas.
Esta estructura actúa como los cimientos que sostienen el contenido, pero cada escritor tiene libertad para adaptarla. En una publicación para redes sociales, la conclusión puede aparecer al principio en forma de gancho para captar la atención de inmediato.
Otro ejemplo de adaptación creativa de la estructura se observa en los correos de venta que, en lugar de seguir el orden tradicional comienzan con una anécdota personal, captando la atención y generando curiosidad. Luego, la introducción al tema específico aparece más adelante para contextualizar el mensaje, y finalmente se cierra con una conclusión que incluye una llamada a la acción.
Uso de un vocabulario variado.
Un vocabulario variado hace más interesante tu prosa. Usar sinónimos e imágenes sensoriales puede transformar un texto sencillo en un texto extraordinario.
“La repetición puede resultar monótona. La variedad en el lenguaje no solo mantiene el interés, sino que también refuerza el mensaje.”
Para mejorar tu vocabulario, la sugerencia no ha cambiado demasiado desde que contamos con la imprenta: leer mucho amplía tu léxico y con él el espesor de tus producciones textuales.
Por último, realizar ejercicios de escritura también es funcional a tu propósito de crear tu storytelling para vender. Escribir un diario personal te ayuda a reflexionar y expresar pensamientos y emociones. Escribir ensayos o textos argumentativos sobre diferentes temas nos obliga a ser analíticos y anticipar la respuesta del receptor al construir argumentos.
Reescribir textos ya existentes también es beneficioso. Al revisar y cambiar otros escritos, consolidamos la práctica de estructura y estilo.
Recurrir a los recursos de estilo.
Los recursos literarios enriquecen tu escritura, a continuación señalo tres de ellos que es posible integrar a tus textos personalizándolos con tu estilo:
- Metáforas
- Analogías
- Hipérboles
Metáforas y comparaciones: ambas comparan dos cosas, pero de maneras ligeramente diferentes: las metáforas superponen la imagen de dos objetos directamente, diciendo que una cosa es otra: «El tiempo es oro». Por su parte, las comparaciones aproximan esas imágenes utilizando los nexos conectores «como» o «parece»: «Sus ojos brillaban como estrellas».
Analogías: son comparaciones más extensas que explican una idea o situación compleja al compararla con algo más sencillo o conocido por los lectores, porque el punto de referencia de tus textos siempre es tu audiencia receptora. Son útiles para clarificar conceptos abstractos o difíciles de entender.
«La célula funciona como una fábrica: el núcleo es el director, las mitocondrias son las plantas de energía y la membrana celular es la valla de seguridad.»
Aliteración: es la repetición de sonidos al comienzo de varias palabras en una oración o verso. Este recurso crea ritmo musical en el texto y puede hacer que ciertas frases sean más memorables: «Bajo el brillo del bello cielo azul.»
Hipérbole: es una exageración deliberada, usada para enfatizar un punto o crear un efecto dramático. Es efectiva para transmitir emociones intensas o describir situaciones extremas.: «Te llamé mil veces y nunca contestaste.»
Para ampliar tu conocimiento sobre la escritura persuasiva utilizada al escribir publicaciones para tu blog o redes sociales, te invito a leer Cómo escribir mejores post.
El storytelling para vender no es solo para expertos.
No es necesario ser un experto para usar el storytelling para vender tus productos o servicios online. Lo que realmente importa es la intencionalidad de expresar tus ideas de forma clara y honesta, buscando antes la conexión que la perfección.
Porque no se trata de compararte con ningún otro productor de contenidos o escritor. Ni de entrar en una carrera loca por escribir como quienes se dedican profesionalmente a las palabras. Esta actitud drena tu energía y termina por frustrarte, porque ser otra persona es insostenible. Tus textos no tienen que ser «perfectos» sino comunicar genuinamente tus ideas.
Si te gustaría aprender cómo hacerlo paso a paso, te invito a descubrir Escribe y vende. En este libro digital comparto estrategias prácticas para crear textos que enganchen, emocionen y conviertan lectores en clientes.
No importa si nunca antes te consideraste hábil escribiendo, mi objetivo en este libro digital es que aprendas a usar tus palabras para vender sin forzarte a distorsionar tu identidad.
Que te divierta.
Que sea real.